Buscando juguetes que contribuyeran a la estimulación integral de mi pequeño bebé, me encontré con este espejito de Imaginarium. Tiene por nombre Melody VEO-VEO y de primera mano tiene el aspecto de una polvera (un poco más grande, claro está).
Presenta un espejito rebatible unido a una base de plástico duro y sumamente colorido. Pero, aunque el aspecto solo ya llamó mi atención, lo bueno viene al encender este aparatito.
El espejo no es solamente un espejo, sino que se trata de una pantalla en la que el bebé no solo puede ver reflejado su propio rostro y el de quienes se encuentren jugando con él, sino que verá imágenes.
Estas imágenes se corresponden con la canción elegida en la base del juguete y seguirán el ritmo de la música a la vez que aparecen. Además de las canciones (famosas melodías clásicas), el niño podrá optar por escuchar los sonidos de cuatro instrumentos musicales (violín, xilófono, saxofón y tambor) con solo pulsar las teclas identificadas con las imágenes en la base del Melody Veo – Veo.
Este espejito mágico está concebido no solo para proveer una fuente de diversión para los niños más pequeños sino que para desarrollar tanto la memoria como la percepción sensorial y el desarrollo de la destreza manual a través del manejo del espejo rebatible y los grandes botones de colores.
Funciona con baterías pero – buena noticia para los padres y sus bolsillos – incluye una opción de ahorro, lo que significa que se apagará si transcurren algunos minutos sin actividad. Genial.