Lo habitual y lo más aconsejable es que los niños hagan la siesta hasta los seis años más o menos, pero son muchos los niños que a partir de los tres años ya no tienen ganas de dormir después de comer y prefieren pasarlo bien, pero deben descansar después de comer no es nada aconsejable que jueguen mucho y por eso deben entender que si no quiere dormir no pasa nada pero deberá jugar tranquilamente para tener una correcta pausa entre la mañana y la tarde. Con estos juegos y una luz tenue quizá le entre sueño mientras se divierte y pueda descansar.
Marionetas de dedo
Estas marionetas estimulan la creatividad y la imaginación del niño y pueden jugar tranquilamente tumbados en el sofá o en la cama. A través de estas marionetas de dedo se pueden potenciar muchos aspectos por eso es aconsejable en las conversaciones en estos juegos potencies valores adecuados para la edad del pequeño.
Veo – veo
Este juego clásico y tradicional se puede realizar perfectamente tumbado en la cama. El juego consiste en seguir estas instrucciones de diálogo:
– Veo veo
– ¿Qué ves?
– Una cosita
– ¿Y qué cosita es?
– Empieza por la letrita…
Consiste en que tu hijo piense en un objeto que haya en la habitación y tú lo tengas que adivinar con la pista que te ha dado con la letra inicial. Hay más variantes de este juego, puede ser una pista con color, etc.
Las cinco preguntas
Este juego consiste en que debes pensar un objeto de la casa y él deberá adivinarlo únicamente preguntando 5 preguntas. Por tanto deberá pensar muy bien qué quiere preguntar antes de hacerlo y así poder adivinar el objeto. Con este juego podrá aprender a seguir instrucciones y a clasificar adecuadamente la información para poder acercarse a tu objeto pensado.
¿Con cuál de estos tres juegos prefieres jugar con tu hijo en la hora de la siesta?
Fotografía: mujer.info